En pocas palabras, una cerveza trapense es una cerveza elaborada en un monasterio habitada por monjes trapense. Actualmente, sólo existen en el mundo siete cervezas hechas en esta condición. Seis de esos monasterios se encuentran en Bélgica. El restante en Holanda… precisamente el que elabora La Trappe, una cerveza de doble fermentación que se elabora desde 1884, en la abadía holandesa de Koningshoeven.
¿Hacemos una visita a la abadía? Pues lo primero de todo es acercarse hasta la ciudad holandesa de Tilburgo. El monasterio queda a escasos kilómetros, por la carretera que va hacia Eindhoven, La dirección exacta, para el que se mueva con el GPS, es la siguiente: Eindhovenseweg 3, Berkel-Enschot Postbus 394, 5000 AJ Tilburg.
Durante la visita, el viajero tiene la posibilidad de conocer la historia de la abadía… almismo tiempo que se visitan todos o casi todos los lugares donde se elabora La Trappe. El recorrido, siempre guiado, viene a durar unos 45 minutos, a lo que hay que sumar un vídeo de historia de casi media hora . Ni que decir tiene que, al acabar la actividad, será casi obligado sentarse en la cervecería y disfrutar de una jarra de Trappede.
El precio de la visita básica es de 10 euros por persona, aunque hay visitas más completas, como aquella que incluye un menú de aperitivos.
A todo esto… ¿de dónde viene el nombre de La Trappe?, Pues es fácil. El sobrenombre de trapense proviene de un movimiento de reforma eclesial ocurrido dentro de la familia cisterciense, que empezó en el siglo XVII en el monasterio francés de La Trappe, en Normandía. Por esta razón, a las comunidades que abrazaron esta reforma se las suele llamar suelen trapenses y a los monasterios que habitan trapas.
Actualmente, en España, pueden conseguirse las siguientes variedades de cerveza Trappe tiene para ofrecer: La Trappe Blond, una rubia muy fina; La Trappe Dubbel, más bien dulce y bastante aromática y La Trappe Quadrupel, la más fuerte del grupo.